Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



viernes, 13 de agosto de 2010

De que Todo Unicitario Debe Entender que Sin Trinidad, No Hay Salvación... (2)

En la primera parte expliqué por qué nuestro Redentor debe ser enteramente humano, pero no simplemente humano, cierto?

Así pues, sigamos.

Tenemos a la segunda persona de la Trinidad -el Verbo de Dios- encarnado, un Verbo de Dios que vive su vida meramente como hombre, una vida de entera observación de la Ley de Dios, una vida vivida como ningún ser humano la ha podido vivir jamás, es decir, una vida sin pecado.

Tenemos a un Verbo de Dios que limita su divinidad, que la rebaja a la altura de un ser humano, un Verbo de Dios que acepta recibir sobre él el castigo que le corresponde a su pueblo y que muere ocupando nuestro lugar librándonos del merecido castigo que justamente nos habría correspondido.

Ahora bien, para que se ejecute el castigo necesitamos un juez que dicte sentencia, no es así?
10 Con todo eso, YHWH quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento.
Isaías 53
Fue la cruz un acto de masoquismo?

Al contrario, fue un acto de Amor tal como nos evidencia Juan 3:16,
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
La cruz es terrible, no hay duda, pero es perfecta en el sentido que nos da una idea del inmenso, hiperbólico, incomprensible en ocasiones, Amor de Dios pues la terrible muerte de Jesús servía para -entre otras muchas cosas- dar vida eterna al Pueblo de Dios, de ahí que el Dios quisiera quebrantar al que nunca hizo maldad, ni hubo engaño en su boca.

Pero no me dejéis divagar; decía que Dios Padre debe ejecutar el castigo sobre el Hijo para poder llevar a cabo la Cuadratura del Círculo es decir, castigar nuestro pecado perdonándolo al mismo tiempo.

Y esto nos obliga a tener que aceptar no solo que el Padre es Dios, sino que el Hijo también lo es, no es así?

Ahora bien, qué pasa con el Espíritu Santo?

Bien, el Espíritu es absolutamente necesario no solo en el momento en que se realiza la Salvación del hombre (regenerándole, abriendole los ojos, otorgándole fe, moldeando su carácter a inagen de Jesús...) si no bastante antes como explicaré en breve.

Eso sí, quedaos en mente lo que acabo de mencionar, es decir, que en nuestra Salvación es necesario el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo pues sin uno de los tres, el Plan de Salvación se queda cojo.

Pero por qué acabo de decir que el Espíritu Santo es necesario para nuestra Salvación antes de que se lleve a cabo la Salvación efectiva del ser humano?

Porque el Espíritu Santo no estaba metido en un divino armario esperando la promesa del Pentecostés.

Es decir, Jesús debía ser humano, enteramente humano, pero también debía ser sin pecado para poder ocupar nuestro lugar, cierto?

Así pues, cómo pudo vivir el Cordero de Dios, como hombre, sometido a las mismas tentaciones que los hombres, pero mantenerse sin pecado...?

Y la respuesta es la siguiente: lo hizo porque Jesús vivió su vida en el Poder del Espíritu.

Es decir, Jesús vivió toda su vida resistiendo al pecado, a las contínuas tentaciones, vivió sin pecar jamás, pero lo hizo con las mismas herramientas que tenemos tú y yo: el Espíritu Santo.

No hay día que no meta la pata y no peque, lo cual hace que me maraville del Amor de Jesús por Dios y ponga en su justa medida el enorme sacrificio de toda la vida de lucha de Jesús.

Ahora bien, en la relación Jesús-Espíritu Santo, vemos que es cierto sentido es bidireccional, es decir, vemos que en el Nuevo Testamento abundan los pasajes donde Jesús se somete al Espíritu, se deja guiar por Él, pero igualmente vemos que también hay gran cantidad de pasajes donde vemos que el Espíritu busca principalmente glorificar al Hijo, no es cierto?
13 Pero cuando vengael Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.
14 Él me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber.

Juan 16
Esta es una de las razones por las que desconfío tanto del movimiento pentecostal, es decir, una de las funciones del Espíritu Santo es la de glorificar a Jesús, ponerlo en relieve, evidenciar que el mundo es Cristocéntrico y de que de él, por él y en él son todas las cosas.

No obstante, qué pone en primer plano el movimiento pentecostal?

El Espíritu Santo.

Y esta acentuación es contraria a la Voluntad de Dios como veremos en próximas entradas.

Mientras tanto dad gracias a Dios por todo en el Nombre de nuestro Señor Jesucristo...