Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



viernes, 3 de febrero de 2012

De Citas de Esas Tan Buenas que No Te Cansas de Releer de Tanto en Tanto... (23)


Escuchadme, porque esto liberará a muchos de vosotros.

Te levantas una mañana bien temprano, tienes un momento de calma sintiendo la presencia de Dios, estudias la Palabra, parece que Dios te habla directamente a ti, sales fuera a testificar a todo el mundo, y eres obediente...
Y chico, ese día lo hiciste todo bien, quiero decir que te sientes como en la cima del mundo.
Has amado a tu esposa, no has dado ninguna patada al gato, tú... has caminado con Dios, y estás tan feliz al final del día.

Pero al día siguiente te levantas tarde porque no tendrías que haberte quedado viendo la tele hasta tan tarde, sientes que no deberías estar en el mundo, ni testificas cuando tienes una buena oportunidad, y te sientes lleno de una profunda tristeza...

Sabes qué es eso?
Idolatría.
Te has convertido en la fuente de tu propia felicidad, tu alegría depende de tu trabajo.
Pero no, nuestra alegría solo puede venir del trabajo consumado por Jesucristo.
Paul Washer

Una buena ilustración sobre por qué el egocentrismo a la larga es destructivo:
No dura y acaba dejándote con una terrible sensación de indefensión, tan pronto tu ídolo se derrumba.

Y al mismo tiempo, una buena ilustración del por qué seguimos adelante a pesar de nuestros muchos problemas:
La fuente de nuestra alegría se encuentra más allá de nosotros.