Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



martes, 6 de noviembre de 2012

De la Pertinente Ambigüedad de Efesios 3:18...

17 para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor,
18 seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura,
19 y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.

Efesios 3:17-19
El versículo 18 se me antoja perfectamente ambíguo, pues por un lado, Pablo ora para que todos los santos lleguemos a comprender mediante su Espíritu el amor de Jesús, pero por otro lado, la ambigüedad del verso nos permite interpretarlo como que el amor de Jesús solo puede llegar a ser comprendido en la comunidad, es decir, con todos los santos.

Cierto, pues que solo tengamos un maestro que es el Cristo, y que nosotros seamos su cuerpo, implica en cierto modo, que los tesoros de la sabiduría y del conocimiento de Dios son revelados por el Espíritu mediante su cuerpo:
Todos los santos.