Déu Pare, dame Gracia y pone en mí el deseo de buscarte, para que al buscarte pueda encontrarte, para que al encontrarte pueda amarte, y para que al amarte pueda odiar con todas mis fuerzas, con toda mi alma y todo mi corazón, todos los pecados de los que me has salvado...
En el Nombre de Jesús, amén!



jueves, 22 de noviembre de 2012

De que No Saldrán de Nuestros Labios...

46 Cerca de la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿Por qué me has desamparado?
Mateo 27:46
Y ya estamos libre de todo desamparo, pues una de las razones por las que Jesús dijo esas palabras fue para que nosotros no las tuviéramos que pronunciar jamás...